Alma Delfina: La Sorprendente Razón Detrás de su Decisión de Dejar el Glamour y la Fama

En México, aquellos que crecieron en la década de 1980 seguramente recordarán con nostalgia la sonrisa cautivadora de Alma Delfina. Su participación en la famosa serie Cachún Cachún Ra Ra la convirtió en una de las figuras más queridas de la televisión mexicana. Con el paso de los años, su rostro desapareció gradualmente de la pantalla, pero ahora, a los 64 años, Alma Delfina se ha abierto sobre su carrera, las dificultades en su vida personal y la razón detrás de su decisión de alejarse del centro de atención.

Un Comienzo en Camargo, Chihuahua

Alma Delfina Martínez Ortega nació en 1960 en Camargo, Chihuahua, en el seno de una familia numerosa y llena de talento. Como la menor de diez hermanos, Alma creció rodeada de un ambiente artístico en el que la creatividad era cultivada desde una edad temprana. Su hermano mayor, Gonzalo Martínez Ortega, sería un influyente director de cine, mientras que sus hermanas, Evangelina y Socorro Bonilla, también dejaron su huella en la actuación. Desde pequeña, Alma estuvo inmersa en este mundo, lo que la impulsó a soñar más allá de los límites de su pueblo natal.

 

La mudanza a la Ciudad de México fue un punto de inflexión en su vida, pues la joven Alma comenzó a explorar su interés por la actuación. Inicialmente, se inscribió en Bellas Artes, pero pronto se sintió abrumada por el entorno y decidió tomar otro rumbo. Fue entonces cuando su hermana Evangelina la animó a estudiar en el Instituto Andrés Soler, donde sus sueños de convertirse en actriz comenzaron a materializarse.

El Salto al Estrellato

Alma Delfina

El camino de Alma al estrellato fue, en muchos sentidos, una combinación de talento, oportunidad y las conexiones familiares que ella poseía. Su cuñado, el reconocido actor Héctor Bonilla, fue quien le presentó su primera gran oportunidad en el teatro al recomendarla para un papel en la obra Malcom contra los eunucos, dirigida por Alejandro Bichir. Sin embargo, fue una presentación en el Instituto Nacional Helénico, donde interpretó a la Virgen María en un Nacimiento, lo que la catapultó a la fama. Allí, el productor chileno Valentín Pimstein la descubrió y le ofreció un papel en la telenovela Mundo de Juguete, un hito que marcó el inicio de su carrera televisiva.

A partir de ahí, Alma Delfina se consolidó como una de las actrices más queridas de la época. Su participación en Cachún Cachún Ra Ra le dio fama internacional, y su personaje, Bárbara Bejarano, dejó una huella imborrable en las generaciones que crecieron viendo la serie. La serie no solo fue un éxito en televisión, sino que también dio lugar a una obra de teatro y una película.

El Cine y la Televisión: Un Viaje de Éxitos

A lo largo de su carrera, Alma Delfina se destacó en ambos ámbitos, tanto en cine como en televisión. Su filmografía comenzó en los años 70 con su participación en películas como Para servir a usted (1976) y México México Ra Ra Ra (1976), dirigida por Gustavo Alatriste. En 1985, la actriz logró reconocimiento internacional con su actuación en Vivir un poco, una telenovela en la que compartió pantalla con Angélica Aragón.

A medida que pasaban los años, Alma continuó cosechando éxitos en telenovelas, pero también tomó riesgos interpretativos que le permitieron consolidarse como una actriz versátil. Su actuación en Pueblo chico, infierno grande (1997), como una villana compleja, le valió el premio a la Mejor Villana, lo que reafirmó su capacidad para interpretar papeles multifacéticos.

 

La Vida y El Triste Final de Alma Delfina - YouTube

La Maternidad y la Pausa en su Carrera

A pesar de su éxito profesional, Alma Delfina también experimentó momentos difíciles en su vida personal. En la década de 1980, su relación con el actor Salvador Pineda fue tumultuosa y estuvo marcada por celos y una fuerte inestabilidad emocional. Esta relación terminó de forma abrupta, lo que dio paso a una nueva etapa en la vida de Alma.

En los años 90, Alma comenzó un romance con el actor Jaime Garza, quien pasaba por un doloroso proceso de duelo tras la muerte de su novia, la actriz Viridiana Alatriste. Aunque su relación con Garza fue profunda y estable, también terminó cuando él se enamoró de otra mujer, la actriz Victoria Ruffo. Este rompimiento dejó a Alma devastada, pero con el tiempo, ella decidió enfocarse en su bienestar y en su carrera.

A finales de los años 90, Alma conoció a Michael Smith, un empresario estadounidense, con quien se trasladó a Los Ángeles. La maternidad llegó en 1994 con el nacimiento de su hija, Natalia, lo que llevó a Alma a priorizar su vida familiar sobre su carrera. Aunque continuó trabajando de forma esporádica en producciones internacionales, su vida personal se convirtió en su principal enfoque.

Un Regreso Triunfal y una Vida Plena

A pesar de haberse alejado de la fama, Alma Delfina regresó al mundo de la televisión en 2022 con Mi Secreto, una adaptación moderna de la novela Una Intrusa. Hoy, a sus 64 años, Alma disfruta de una vida tranquila y privada, lejos de los reflectores. Su tiempo ahora está dedicado a su familia, y se ha alejado de la necesidad de buscar la fama que una vez tuvo. En sus últimas entrevistas, Alma ha declarado que su felicidad ya no está vinculada al reconocimiento público, sino a la satisfacción interna y al equilibrio que ha logrado en su vida.

Alma Delfina, la mujer que conquistó los corazones de millones de mexicanos con su talento, su belleza y su presencia, ha encontrado paz al alejarse del mundo del espectáculo. Ahora, su vida gira en torno a su familia, sus seres queridos y los pequeños momentos que la vida le ofrece. Con sabiduría y una perspectiva serena sobre la vida, Alma Delfina sigue siendo un referente de una generación que, más allá de su carrera, siempre la recordará con cariño y admiración.