Diana Ross, una de las mayores leyendas del mundo de la música, ha sido sinónimo de éxito y glamour durante décadas. Como la voz principal de The Supremes y luego en su carrera en solitario, Ross no solo dejó una huella imborrable en la música, sino también en la cultura popular. Sin embargo, a lo largo de su carrera, su vida personal ha estado envuelta en misterio, lo que ha dado lugar a muchas especulaciones.
Ahora, a los 35 años, uno de sus hijos ha hablado, confirmando lo que muchos fanáticos han sospechado durante mucho tiempo. Este nuevo capítulo en la vida de la cantante no solo arroja luz sobre los aspectos ocultos de su vida personal, sino que también profundiza en la relación que tuvo con su familia y amigos cercanos.
La carrera estelar de Diana Ross
Diana Ross nació el 26 de marzo de 1944 en Detroit, Michigan, y desde muy joven mostró talento para la música. Fue en The Supremes, el famoso grupo vocal de Motown, donde comenzó su ascenso hacia la fama. Junto a Florence Ballard y Mary Wilson, Ross llevó al grupo a ser una de las bandas más exitosas de todos los tiempos, con canciones como “Baby Love”, “Stop! In the Name of Love” y “You Can’t Hurry Love”. Su estilo vocal único y su presencia en el escenario la convirtieron en una superestrella mundial.
En 1970, Ross decidió iniciar su carrera en solitario, logrando éxitos como “Ain’t No Mountain High Enough” y “I’m Coming Out”. También incursionó en el cine, ganando elogios por su interpretación de Billie Holiday en la película “Lady Sings the Blues” (1972), por la cual fue nominada a un premio Oscar.
La vida personal bajo el radar
A pesar de su inmensa fama, Ross siempre mantuvo su vida personal lejos del ojo público. Estuvo casada dos veces, primero con Robert Ellis Silberstein, con quien tuvo dos hijas, Tracee Ellis Ross (estrella de televisión) y Chudney Ross. Más tarde, se casó con el multimillonario noruego Arne Næss Jr., con quien tuvo dos hijos más, Ross y Evan. La pareja se divorció en el año 2000, pero mantuvieron una buena relación hasta la trágica muerte de Næss en 2004.
A lo largo de los años, muchos rumores circularon sobre la vida privada de Ross. Se hablaba de romances con grandes figuras del entretenimiento como Berry Gordy (fundador de Motown), Gene Simmons (miembro de Kiss) y el actor Ryan O’Neal. Sin embargo, Ross siempre fue reservada cuando se trataba de su vida amorosa, lo que alimentaba aún más las especulaciones.
La revelación de su hijo
Ahora, su hijo Evan Ross, de 35 años, ha decidido compartir lo que él y su familia sabían desde hace tiempo. Según Evan, aunque Diana Ross era una figura pública que irradiaba confianza y control, en su vida personal enfrentaba desafíos que nunca quiso compartir con el mundo. Él describe cómo, detrás de los focos y el éxito, su madre tuvo que lidiar con la soledad y la presión constante de estar siempre a la altura de las expectativas.
Evan también destacó lo mucho que Ross se esforzaba por proteger a su familia de la atención mediática, lo que explica por qué mantuvo ciertos aspectos de su vida personal en secreto. A pesar de los rumores sobre romances y tensiones familiares, Evan afirma que su madre siempre priorizó a sus hijos y les inculcó valores de humildad y trabajo duro.
¿Una vida oculta?
Lo que muchos sospechaban durante años era que Diana Ross, aunque siempre estaba en el centro de atención por su carrera, tenía una vida oculta en términos emocionales. Evan Ross explicó que su madre, siendo una figura tan influyente y poderosa en el mundo del espectáculo, tuvo que crear una “burbuja” para protegerse de las críticas y las presiones que acompañaban su estatus. Este aislamiento emocional hizo que muchos de sus problemas personales quedaran fuera de la vista pública.
Además, Evan también confirmó los lazos profundos que su madre tenía con algunas de las personas más importantes de su vida, incluidos Smokey Robinson y Berry Gordy. Estos lazos, aunque a menudo sujetos a rumores y especulaciones, eran en su mayoría amistades profundas y duraderas, y no siempre romances como se había sugerido.
La leyenda sigue viva
A pesar de los retos emocionales y personales que enfrentó, Diana Ross sigue siendo una figura icónica en el mundo de la música. A sus 80 años, continúa siendo una fuente de inspiración para muchos, y su legado sigue creciendo con el tiempo. Las revelaciones de su hijo Evan no solo aportan una nueva perspectiva sobre la vida de Ross, sino que también muestran el profundo amor y respeto que sus hijos sienten por ella.
Lo que queda claro es que, aunque Diana Ross enfrentó luchas personales que decidió mantener privadas, su influencia en la música, la cultura y su familia sigue siendo inmensa. Su hijo Evan ha dado una ventana a la vida de una mujer que, más allá del glamour y los éxitos, es también una madre amorosa y una figura fuerte que superó innumerables desafíos.
El mito de Diana Ross sigue vivo, y sus hijos están allí para asegurar que su legado perdure para las futuras generaciones.
