Barrera y Morales Coinciden: “Canelo Ganará, Pero Schull No Será un Regalo” — Análisis de Dos Leyendas Antes de la Guerra en Las Vegas
En medio de la tensión creciente y con Las Vegas vestida de gala para recibir una de las peleas más esperadas del año, dos leyendas mexicanas que alguna vez se odiaron arriba del ring se dieron la mano fuera de él para hablar con respeto, objetividad y pasión del próximo choque entre Saúl “Canelo” Álvarez y el invicto cubano William Scull.
Marco Antonio Barrera y Erik “Terrible” Morales —rivales eternos y ahora colegas en la reflexión— ofrecieron un análisis conjunto que dejó claro que, aunque Canelo parte como favorito, el camino no está pavimentado hacia la victoria.
“Canelo ya no es el chavo que iba al frente a lo loco”
Marco Antonio Barrera, múltiple campeón mundial en tres divisiones, elogió la evolución táctica del tapatío. “Ahora te mide, te estudia, y te va desgastando. Yo creo que va a ganar por decisión unánime. Pero si se desespera, Schull tiene lo suficiente para complicarlo”, advirtió.
Para Barrera, el estilo cubano no debe subestimarse. “Los cubanos son fríos, inteligentes, saben manejar el ritmo. Saben retroceder, contragolpear, enfriar una pelea. Y Scull está invicto por algo”, comentó con la voz de quien ha aprendido a respetar los detalles.
Morales: “Canelo puede noquear entre el octavo y el décimo”
Más contundente fue Erik Morales, gladiador nato, quien no solo ve ganando a Canelo sino anticipa un desenlace explosivo: “Si lo trabaja bien, lo puede noquear. Entre el octavo y el décimo. Tiene poder en ambas manos y remata cuando el otro baja la guardia. Pero si se va con todo desde el principio, puede cometer errores”.
Morales recalcó que la paciencia será el factor decisivo. “Scull va a hacerlo fallar. Va a querer desesperarlo. Y ahí es donde se verá la madurez de Canelo. Si lo saca de ritmo, puede haber problemas”.
Una guerra de cerebros, no de puños
Pese a sus diferencias pasadas, Barrera y Morales coincidieron en algo que va más allá del resultado: el boxeo ha cambiado. “Hoy los peleadores tienen que pensar más. No todo es fuerza. Se gana con cabeza fría, como Canelo lo ha demostrado en sus últimas peleas”, dijeron casi al unísono.
El combate entre Canelo y Schull, programado para este sábado en el T-Mobile Arena, no será una lluvia de golpes desde el primer segundo. “Será una guerra táctica. Mucho boxeo fino. Mucha mente”, aseguró Barrera. Morales complementó: “Eso también es bonito. Ver quién piensa mejor, no solo quién pega más”.
Un duelo de estilos: potencia vs. precisión
Por un lado, el poder, el temple y la experiencia de un Canelo más completo que nunca. Por el otro, la técnica, el ritmo incómodo y la frialdad calculadora de William Schull. La mesa está servida para un choque donde cada segundo contará.
El legado de Canelo está en juego. Si gana, consolida aún más su lugar como el monarca absoluto de las 168 libras. Si pierde, abre la puerta a una nueva era con sabor cubano.
“La sangre llama a la historia”
Mientras los reflectores del mundo se concentran sobre Las Vegas, la afición mexicana enciende veladoras y apuestas. Barrera y Morales —quienes han estado en la arena, han sangrado por la bandera y han sentido el peso de la expectativa— saben que en el boxeo nada está escrito. Pero coinciden en algo claro: si Canelo mantiene la mente fría, la noche será suya.
Este sábado, cuando suene la campana, el tiempo se detendrá por 12 rounds. Y millones verán no solo una pelea, sino un duelo de inteligencias. El destino, como siempre en el boxeo, se definirá con los guantes… pero también con la cabeza.